domingo, septiembre 17, 2006

La Palma de Oro de Cannes como herramienta de venta

"Para que todo permanezca es preciso que todo cambie". Esta es la cita más famosa del libro de Tomasi de Lampedusa: El Gatopardo (Il Gattopardo, 1963, que fue más tarde llevada al cine por Luchino Visconti), y es prácticamente el mismo argumento sobre la cuál versa la historia del filme ganador de la Palma de Oro en el último festival de Cannes: El viento que agita la cebada (The Wind that Shakes the Barley, 2006).

La película, dirigida por Ken Loach, es un excelente ejercicio que muestra la complejidad de la defensa de las ideas mediante la violencia y la lucha entre hermanos a la que están condenados todos los nacionalismos. Su tratamiento y realismo bien la harían merecedora de competir por los premios Oscar, pero desgraciadamente la distancia a la que está su estreno del acontecimiento, nos hace dudar si prodrá mantenerse hasta entonces es la cabeza de los seleccionadores de las candidatas.

Dejando atrás la maestría e imparcialidad con la que es llevada la historia, la campaña de promoción de la película se ha centrado en aprovechar la Palma de Oro en Cannes que ha conseguido, para confirmar el argumento de calidad de la obra. De esta forma, tanto el cartel español como el francés se esmeran en dar a conocer esta información casi por encima del propio nombre de la película y muy alejado de destacar al director del filme, que bien puede ser también un elemento de venta más en este caso.

El diseño francés es menos esmerado y deja bien clara la categoría de una película dirigida a un público exigente. El cartel español es un poco más estático y aprovecha las líneas negras para ganar en claridad, un elemento muy socorrido en los carteles de los últimos años. Lo que sí queda muy claro con el tipo de fotografías utilizadas, es que al equipo de producción nunca se le pasó por la cabeza la campaña de promoción posterior.

Esta creencia mía se basa en que en todos los carteles se han utilizado fotogramas de la acción de la película, lo que deja bien claro que en ningún momento se llevaron a cabo "posados" para ser utilizados en la realización del cartel o en la distribución de materiales a la prensa para ilustrar las fichas artísticas del filme.

Retomando el tema de La Palma de Oro, no sabríamos decir si el festival de Cannes carece de importancia en Reino Unido (el lugar de nacimiento del director del filme), ya que en el cartel inglés se han olvidado totalmente de mencionar el tema, y los nombres de Ken Loach o de Cillian Murphy (actor que salto a la fama gracias a 28 días después [28 days later]).

jueves, septiembre 07, 2006

Google Earth y el marketing audiovisual

Después de más de dos meses de ausencia, no me queda más que pedir una disculpa porque durante todo este tiempo me he perdido de comentar algunas de las campañas más espectaculares a las que hemos podido asistir en la historia del cine.

Y esto va, sobre todo, no en relación con la saturación mediática (porque inversiones fuertes en el periodo de verano siempre las hay), sino a la multitud de acciones especiales que han surgido durante todo este tiempo.

Uno de los casos más especiales vuelve a ir de la mano, como ya es esperado, de Piratas del Caribe: El cofre del hombre muerto (Pirates of the Caribbean: Dead man's chest, 2006). Con la ocasion del estreno, además de las ya espectaculares acciones que se venían desarrollando desde hace más de un año, se ha aprovechado uno de los medios que más notoriedad ha ganado en los últimos meses: Google Earth.

Esta herramienta del Gran Hermano del Internet (Google) que en realidad fue desarrollada por Keyhole, Inc. y más tarde comprada en octubre de 2004 por Google y que comenzó a dar sus primeros pasos en línea en el verano de 2005.

La realidad es que esta impresionante plataforma pasó de ser el stio para ver la azotea de tu casa a convertirse en una herramienta imprescindible para encontrar físicamente en el mundo a las empresas y negocios presentes en el buscador.

Ahora basta con escribir una dirección y la ciudad para que Google automáticamente te ofrezca un mapa exacto de su posición en la calle, el barrio, la ciudad, el país o el Globo.

Es por ello que Disney ha aprovechado la plataforma para crear una isla virtual en medio del mar Caribe. Esta es la primera ocasión en la que se crea una localización ficticia en la herramienta, que no sólo permite entretenerse un buen rato buscándola, sino que en ésta se pueden encontrar fotos, trailers y hasta muestras de la banda sonora original del filme.

Aunque la idea es muy buena y original, la realidad es que han puesto un tanto complicado el acceso de los usuarios. Además de tener que haber instalado el software Google Earth hay que ir a la página http://www.discoverpirateisland.com/ y descargar un software capaz de generar la isla virtual dentro del otro programa. En fin, que si se pensaban que lo de buscar el coche Volvo que también había sido escondido con motivo de la película, esto es parte de lo mismo. Con lo cuál están limitando la acción a verdaderos forofos de la saga.

A pesar de todo, esta no deja de ser una acción de experimentación y estamos seguros que es el comienzo para utilizar Google Earth como herramienta de marketing de personas, empresas o gobiernos.

Fernando